Mujeres en el poder: una ola de cambio

En 2019, la única mujer que ocupó un alto cargo en el liderazgo europeo fue la italiana Federica Mogherini, directora del Colegio de Brujas. Ahora, la Comisión Europea, el Banco Central Europeo y el Parlamento Europeo tienen presidentas: la alemana Ursula von der Leyen, la francesa Christine Lagarde y la maltesa Roberta Metsola. El 48% de los miembros del colegio de comisarios del Ejecutivo Comunitario son mujeres, con miembros como la vicepresidenta Margrethe Vestager que se encarga de la política de competencia. Además, más de una docena de mujeres están al frente de las agencias europeas, incluida la Junta Única de Resolución (Elke Konig), la Defensora del Pueblo Europea (Emily O´Rielly), la Fiscalía Europea (Laura Kovesi) y la agencia de cooperación policial Europol. (Catalina de Bolle). Dos organizaciones dirigidas por mujeres que han sido fundamentales en la crisis pandémica son la Agencia Europea de Medicamentos (Emer Cooke) y el Centro Europeo para el Control y la Prevención de Enfermedades (Andrea Ammon). También están presididos por mujeres el Comité Económico y Social (Christa Schweng), la Autoridad Europea de Protección de Datos (Andrea Jelinek), la Agencia Europea de Seguridad Marítima (Maja Markovi), la Oficina Europea de Pesca (Susan Steele), el Instituto Europeo para la Igualdad de Género (Carlien Scheele) y la Agencia de Asilo de la UE (Nina Gregori).